El campeón defensor del Abierto de Australia, Jannik Sinner, arruinó las esperanzas del público local de manera contundente al derrotar a Alex de Minaur con una actuación dominante en sets corridos, asegurando su lugar en las semifinales. Sinner, el número uno del mundo italiano, no dejó dudas sobre su supremacía en la Rod Laver Arena, superando al octavo sembrado De Minaur por 6-3, 6-2, 6-1 este miércoles. Con esta victoria, se enfrentará al estadounidense Ben Shelton, sembrado 21, en busca de un lugar en la final del domingo.
Sin mostrar señales de la enfermedad que lo afectó en la ronda anterior, Sinner ofreció una exhibición impecable de potencia, precisión y estrategia. “Hoy sentí que tenía todo bajo control”, dijo Sinner en su entrevista en cancha. “Cuando rompes temprano en cada set, todo se hace un poco más fácil, y eso fue lo que pasó hoy”.
El astro italiano, que busca su tercer título de Grand Slam y aspira a convertirse en el primer hombre italiano en ganar tres torneos de este nivel, también está defendiendo por primera vez un título de Grand Slam tras haber conquistado el US Open el año pasado al vencer a Daniil Medvedev. Su confianza era evidente mientras superaba a De Minaur, ampliando su récord perfecto contra el australiano a 10-0. Sorprendentemente, Sinner ha ganado sus últimos 21 enfrentamientos contra rivales australianos, una racha que subraya su dominio.
Para De Minaur, las señales eran claras antes incluso de que comenzara el partido. Aunque existía una pequeña esperanza tras los problemas de Sinner en su partido anterior, donde el italiano admitió sentirse mareado y mal físicamente debido al intenso calor, la actuación de Sinner en los cuartos de final no dejó espacio para la duda. En un día mucho más fresco en Melbourne, Sinner se movió sin esfuerzo, sin mostrar signos de incomodidad o fatiga.
“Ayer todo fue sobre recuperación”, explicó Sinner al ser consultado sobre su rápida recuperación. “Lo mantuvimos muy ligero, con una práctica corta de unos 30 o 40 minutos con mi equipo. Cuando eres joven, tu cuerpo se recupera rápido, y hoy me sentí muy bien”.
De Minaur, alentado por un público local entusiasta, intentó interrumpir el ritmo de Sinner, pero le costó causar un impacto significativo. Un punto crucial de 24 golpes al inicio del partido terminó con Sinner rompiendo el saque para tomar ventaja de 3-1, marcando el tono del resto del encuentro. De Minaur, quien apenas logró cuatro tiros ganadores en el primer set, se mostró cada vez más frustrado mientras los potentes golpes desde el fondo de la cancha del italiano y su agresión incesante dictaban el juego.
El segundo set se desarrolló de manera similar, con Sinner rompiendo el saque de inmediato para tomar el control. Su derecha fue particularmente letal, consiguiendo otra ruptura de servicio y llevándose el segundo set en apenas 40 minutos. De Minaur, visiblemente desconcertado, negaba con la cabeza buscando respuestas que nunca llegaron.
Para el tercer set, Sinner estaba completamente en control, rompiendo el saque de De Minaur dos veces para avanzar 3-0 rápidamente. Los errores del australiano solo aceleraron su derrota mientras Sinner cerraba el partido en menos de dos horas. El ataque implacable del italiano dejó claro que está listo para los desafíos que se avecinan.
En semifinales, Sinner se enfrentará al joven estadounidense Ben Shelton, quien alcanzó su primera semifinal de Grand Slam tras una victoria en cuatro sets sobre el italiano Lorenzo Sonego. Shelton mostró una notable compostura y potencia para imponerse por 6-4, 7-5, 4-6, 7-6 (7/4), demostrando su potencial como un rival peligroso.
Mientras Sinner se prepara para enfrentar a Shelton, también tiene la mirada puesta en la final del domingo, donde podría enfrentarse al legendario 10 veces campeón del Abierto de Australia Novak Djokovic o al segundo sembrado Alexander Zverev. Con la historia en juego y su nivel en su punto más alto, la búsqueda de Sinner por consolidar su legado como uno de los grandes del deporte está en pleno apogeo.